Desmitificando mitos

Agradezco, una vez más, a mi lector anónimo, que emociona con su prosa y su poesía, con verdades sin complejos, y su innominada personalidad. Esperemos que algún día junte el coraje suficiente (o se desvulnerabilice solo un poco), como para develar los misterios. Aprovecho para aclarar que, por lo menos yo (Bama, dado que Sally me ha abandonado en la dura tarea de publicar en este blog), no tengo tantos bajones como mis escritos pueden aparentar. Mis primeras incursiones en la poesía pueden parecer negras, quizás porque, en mi inexperiencia, recurro a recursos un tanto... trillados. sin embargo, soy una persona alegre. Quiero dejar en claro esto, para que nadie crea que odio la vida, o que este blog es un deseperado intento previo al suicidio. Todo lo contrario: vivo cada día, todos los días, con toda la pasión posible. Me encanta vivir, me encanta el amor, me encantan las desilusiones, adoro sentir, me fascina la música, el calor, el invierno, el viento, la lluvia, y la preciosa, preciosa literatura.
Asi que nada, ni bajon, ni depresión. Saludos a todos.